Ayer el ICE publicó este comunicado de prensa. Lo bueno, que se están asumiendo los retos que se presentan
El informe aborda temas en los cuales se puede mejorar y plantea la oportunidad para dar ejemplo positivo a nivel mundial.
Este 31 de mayo de 2011 el Estado costarricense recibió el Informe preparado por el Relator Especial de Naciones Unidas sobre Derechos de Pueblos Indígenas, el señor James Anaya, elaborado después de su visita a nuestro país entre el 24 y el 28 de abril pasado.
La visita se llevó a cabo ante el interés del señor Relator por conocer la realidad del Proyecto Hidroeléctrico El Diquís (PHED) y su relación con las poblaciones indígenas del sur del país y gracias a la invitación y facilidades que dispusiera el Estado de Costa Rica.
En su informe el señor Relator menciona aspectos en los cuales existe posibilidad de mejora a la gestión que hasta el momento ha llevado a cabo el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) en el proceso de factibilidad del Proyecto Hidroeléctrico El Diquís e indica que para poder llegar a condiciones satisfactorias debe existir voluntad y buena fe en todas las partes involucradas, es decir la comunidad indígena y del Estado. Esa conclusión emana después de constatar, apunta el Relator, que existe esa disposición en la institución y en la mayoría de las representaciones indígenas con las que tuvo oportunidad de compartir durante su visita.
Asimismo, reconoce que existe tanto por parte de la comunidad indígena como por parte del ICE el interés de que se lleve a cabo un proceso de consulta adecuado con las comunidades que serían impactadas por el desarrollo del PHED de acuerdo con las mejores prácticas internacionales. Alcanzar ese objetivo representa, según el Relator en su informe, una gran oportunidad para las poblaciones indígenas y para el Estado Costarricense para dar un ejemplo a nivel mundial de las buenas prácticas en materia de consulta indígena.
Para el señor Anaya, el objetivo de la consulta debe de ser obtener el consentimiento libre, previo e informado de las comunidades indígenas involucradas de manera directa con el PH El Diquís y que ese proceso de consulta consiste en “…un diálogo intercultural de buena fe en el que se busque el consenso y acomodo recíproco de los intereses legítimos de las partes”.
En el documento el señor Relator expone aspectos medulares para poder llevar a cabo de manera exitosa el proceso de consulta como son: la necesidad de que exista el ambiente de confianza, la participación y representatividad en los actores involucrados, la mitigación de asimetrías entre los interlocutores y hasta la participación de facilitadores externos imparciales en el proceso.
Por otra parte menciona algunos temas en los cuales el Estado como un todo debe tomar acciones, pues van más allá del accionar propio del ICE pero que, de manera integral, facilitaría las condiciones para el desarrollo adecuado del Proyecto El Diquís.
El ICE considera constructivas y muy positivas las recomendaciones del señor Relator. Además, con una posición demostrada de apertura al diálogo y de espíritu de concertación de acuerdos, espera que estos aportes sean una herramienta importante, de cara a lo que podría ser un proceso de consulta ejemplar a nivel internacional y un hito en la historia de nuestro país.
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